Las empresas en la era del metaverso: ¿Qué es y cómo les afectará?

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Las grandes empresas tienen su mente (y sus inversiones) puestas en el metaverso, ya que se cree que podría ser el próximo salto de las redes sociales y de Internet. Pero, ¿qué es el metaverso y cómo pueden las empresas prepararse para su llegada? ¿Será algo posible, o se quedará en proyecto? En este artículo reflexionamos sobre el papel de las empresas en la era del metaverso.

 

Cómo acceder al metaverso

¿Qué es el metaverso?

Empecemos por lo más importante: ¿Qué es el metaverso? Se trata de un mundo virtual inmersivo en el que se puede interactuar y que consiste en una extensión de la realidad.

Una de las claves que diferencia el metaverso de un videojuego es que no se trata de un mundo fantástico irreal (como Pokémon), sino una extensión del mundo real en el que podremos hacer las mismas cosas que hacemos en él.

 

Por ejemplo, en el metaverso podremos ir a una exposición o a un concierto real sin movernos de casa.

 

Para ello, emplearemos la tecnología de realidad virtual y aumentada, de modo que la experiencia sea lo más realista posible. Un ejemplo de metaverso es el que se muestra en la película Ready Player One. Si no la has visto, te la recomendamos.

Las características del nuevo mundo virtual

Hay expertos que han establecido cuáles podrían ser las características del metaverso. En general, estas son las 3 que parecen más claras:

  • Interactividad: existe la interacción entre personas, y esta interacción impacta en el mundo virtual, en los objetos y en los usuarios.
  • Corporeidad: se accede en primera persona y el mundo virtual está sometido a las normas del mundo real.
  • Constancia: este mundo no para, aunque una persona no esté conectada. Es decir, que el metaverso funciona como el mundo real: no para, ni descansa, aunque sus usuarios sí lo hagan.

Básicamente este universo es una virtualización del mundo real, y en principio se va a regir por normas similares. Los usuarios podrán crear un avatar que se parezca a la persona (o no) para poder moverse e interactuar en este mundo.

¿Cómo se accede al metaverso?

Hoy por hoy no existe un “metaverso” global. Hay distintas experiencias gestionadas por distintas empresas, pero no están unidas entre sí. Si, por ejemplo, Meta lanza su metaverso, la forma de acceder será de momento a través de su propia plataforma.

 

¿Qué papel tendrán las empresas?

Mark Zuckerberg, el creador de Facebook, tiene claro que el metaverso será el futuro. Tan claro que recientemente cambió el nombre de su compañía a “Meta”. Hoy, se puede leer en su web oficial:

“El metaverso es la siguiente evolución en las conexiones sociales. La visión de nuestra empresa es contribuir a hacerlo realidad. Por eso hemos cambiado el nombre, para reflejar nuestro compromiso con este futuro.”

Que el dueño de Facebook, Instagram y WhatsApp (entre otros) haga una apuesta fuerte por ello nos lleva a pensar que realmente este metaverso tiene oportunidades de existir y triunfar en un futuro próximo. Otras “Big Tech”, como Google, también están dando pasos en dirección a este futuro con el diseño y creación de elementos como las gafas de realidad virtual.

 

Imaginando a los negocios dentro del metaverso

Pero, ¿Qué significaría el éxito del metaverso y cómo afectaría a las empresas? Pues se cree que a muchos niveles. Estas serían algunas de ellas:

Oficinas virtuales

El teletrabajo, impuesto por la pandemia para muchas empresas, ha puesto de manifiesto que es posible trabajar a distancia sin bajar los niveles de productividad (e incluso mejorándolos). El teletrabajo posibilita la descentralización y una mejor optimización del tiempo, ya que evita los desplazamientos.

Pues bien, el metaverso podría ser el futuro de un teletrabajo que mantiene los beneficios de este, pero añade las ventajas de trabajar presencialmente. Las oficinas estarían igualmente “construidas” de forma virtual, y los espacios de trabajo serían realistas. En ellos te podrías tomar un café con un compañero, visitar a un cliente o hacer networking.

Escaparates y tiendas virtuales

Según un informe sobre el eCommerce realizado por Qapla’, las tiendas online han producido a nivel mundial 10.780 billones de euros de facturación en 2021. El metaverso puede terminar de consolidar la venta a distancia, ya que las calles de este universo digital podrían llenarse de escaparates y de tiendas interactivas donde probarse ropa o vivir experiencias.

Publicidad y fidelización de clientes en el metaverso

También la publicidad dará el salto y ofrecerá nuevas oportunidades interactivas en este mundo virtual. La fidelización de clientes encontrará nuevas formas de sorprender y generar el efecto WOW en los usuarios. Queda mucho para saber cómo será exactamente, aunque de momento puedes leer las tendencias de fidelización favoritas en 2022.

 

Posibles beneficios del metaverso para las empresas

metaverso en empresas

En este artículo solo podemos imaginar cómo sería un futuro en el que la realidad se replicara en el mundo virtual, pero algunas de las ventajas que podría tener para las empresas serían:

  • Mejoras en la productividad
  • Ahorro de costes
  • Monitorización de resultados
  • Flexibilidad para los empleados
  • Nuevas formas de conectar con las personas

Para esto, por supuesto, queda mucho tiempo. Y también mucha inversión que permita a las empresas rediseñar sus productos, equiparse con la tecnología necesaria y adaptar la cultura organizativa a la nueva realidad.

Lo bueno es que se espera que, si finalmente el metaverso ve la luz, será de forma progresiva. Por tanto, habrá oportunidad de equiparse llegado el momento.

 

¿Estamos ante una nueva etapa?

La aparición de Internet supuso una revolución a la altura de otras históricas, como la industrial. Ahora no concebimos la vida sin la tecnología y sin Internet, y nos preguntamos cuál será el siguiente invento que nos haga dar un paso más allá. Hay muchas personas que piensan que esto será el metaverso, y aunque nadie sepa si realmente será o no será, la realidad es que hay muchas empresas poderosas invirtiendo en ello. Solo el tiempo dirá a lo que llega.

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